Calles de Lavapiés. Fines de diciembre y el primer día de enero. Pero podría ser cualquier otro mes. Slogans anarcofeministas a mano alzada y en aerosol sobre las paredes del barrio del centro de Madrid, ciudad global:
Mujeres Libres: “Ni amas ni esclavas”. 31 Dic. 2015
Mujeres Libres: “A latigazos contra el patricarcado”. 31 Dic. 2015
Si la escritura en la pared puede leerse como un regalo, ¿qué regalan las activistas de Mujeres Libres a las y los habitantes de la ciudad global en medio de la crisis social y cultural desatada por las políticas neoliberales en el estado español? Por un lado, una práctica de memoria histórica: su nombre mismo, Mujeres Libres, remite a la organización anarcofeminista que articuló desde Madrid una doble lucha–contra el estado y el sistema capitalista, y contra el sistema patriarcal–a fines de la década de 1930. Asuntos pendientes.
Mujeres Libres: “anarcofeminismo o barbarie”. Sin firma: “la no violencia es patriarcal”. 1 Enero 2016.
Por otro lado, las pintadas de Mujeres Libres y otras pintadas sin firma hacen presente también la filosofía y la práctica del anarquismo, más allá de todas sus variantes: la subversión de la autoridad sistémica de un ser sobre otro ser y la búsqueda de la emancipación de todos los seres. Parte del atractivo del anarcofeminismo contemporáneo–en su lucha contra el fundamento patriarcal sistémico de la autoridad en el estado, la división de clases y la cultura capitalistas–es tal vez que constituye (adaptando la visión de Saul Newman sobre el anarquismo) una crítica ética a la autoridad y a la dominación en todas sus formas (en Leonard Williams, 2011: 630). En ese sentido, puede entenderse como teoría y práctica de “responsabilidad infinita” de las y los ciudadanos como sujetos políticos de ponerle fin a la injusticia (Simon Critchley 2007 en Williams, 630). Responsabilidad, en fin, de crear redes armónicas de convivencia y formas de organización dialogadas entre los seres vivos del planeta. De ahí la exigencia, urgente, de dejar atrás el patriarcado heteronormativo. Así los regalos en las paredes.
Sin firma: “My girlfriend turned me into an anarchist”. Arriba: Curruncho. A la izquierda: “Nos dejan sin futuro”. 31 Dic. 2015
Sin firma: “No queremos dueñxs sino vivir liberadas”. 27 Dic. 2015